Ir a clases de cocina en Bilbao es como acudir a una escuela de arte. Y es que cada vez se enseñan más las distintas técnicas y formas de crear un plato de la alta gastronomía, para los que cada bocado debe concebirse como una experiencia para, al menos, gusto, vista, tacto en el paladar y olfato.

En lugares como Bilbao Laratz Escuela De Cocina aprenderemos las distintas técnicas con las que podremos hacer nuestros platos, técnicas muy elaboradas que tienen sus similitudes con las distintas técnicas del arte. Sin embargo, igual que pasa en el arte, no basta con dominar las técnicas para ser el mejor cocinero, aunque hacerlo es importante para poder lograrlo. Como Picasso, que primero fue realista antes de inventar el cubismo, un cocinero tiene que conocer a fondo las técnicas tradicionales y modernas y una vez que sepa cómo se hace cada cosa debe poner su cerebro a trabajar para crear platos nuevos y llamativos.

Gracias a las clases de cocina en Bilbao conseguiremos esa base fundamental con la que trabajar. Conseguir la pericia necesaria para saber que texturas incorporar en cada plato, que sabores mezclar y que técnicas son compatibles entre sí no es solo cuestión de estudio sino de práctica y del método ensayo error. Un cocinero es un artista y como tal no puede esperar que todo sea una obra de arte pero cuando consiga una se dará cuenta que todo el esfuerzo habrá merecido la pena. Y es que la especialidad de los cocineros es hacer feliz a la gente.